María se encontraba en la piscina municipal Os Tilos de Teo, en A Coruña y cuando se fue a meter en el agua en topless la socorrista se acercó a ella y le dijo que «no podía estar dentro del agua sin parte de arriba» y añadió que «era cuestión de higiene».
Pero más sorprendida se quedó cuando la misma socorrista le dijo que «tampoco los niños y niñas se pueden bañar sin parte de abajo». María puso una reclamación en recepción y después de la queja ha conseguido que se cumplan los tres puntos de esa reclamación: Que le devuelvan el dinero de la entrada, que todas las mujeres que quieran bañarse en topless lo hagan y una disculpa pública.
(Vía)
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