El grupo de defensa de los animales Ythan Seal Watch publicó un vídeo el pasado domingo en el que se puede ver a cientos de focas huyendo al ver a personas en la reserva Forvie National Nature, en Escocia.
En esta reserva hay más de 1.000 focas grises y la zona está rodeada por un montón de carteles en los que se advierte que no se puede molestar a los animales y que además esto puede ser multado con 5.000 libras o medio año de prisión.
A pesar de los carteles, los turistas hacen caso omiso y continúan visitando la playa. Según explican desde Ythan Seal Watch, a lo largo del año 2018 la organización ha visto 13 incidentes de este tipo, en el que las focas fueron espantadas y obligadas a escapar hacia el mar.
La organización explicó que las focas estuvieron fuera durante los últimos dos días sin ser molestadas y que hacerlas volver al mar de esta manera puede causarles graves problemas. Necesitan descansar, mudarse y reproducirse, y para eso están legalmente protegidas.
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