Un bombardero supersónico Tu-22M3 ‘Backfire’ estaba aterrizando en Murmansk (Rusia) con poca visibilidad cuando rebotó en la pista, rompiendo la parte trasera del avión, enviando a la cabina de la cabina rodando al suelo mientras el resto del avión se incendia.
En el accidente murieron tres de los cuatro ocupantes que iban en el avión. El Ministerio de Defensa comunicó que en ese momento el avión no estaba armado.
Se ha abierto una investigación, pero el experto en aviación Vadim Lukashevich dijo que cree que el choque probablemente fue causado por una ráfaga de viento vertical que golpeó repentinamente el avión antes del aterrizaje, según la agencia de noticias RIA Novosti.
El Tupolev Tu-22M es un bombardero estratégico y de ataque marítimo, supersónico, de largo alcance y con ala de geometría variable desarrollado por Tupolev en la Unión Soviética entre finales de los años 1960 y principios de los 1970. Se fabricaron unas 500 unidades de todas sus variantes y permanece en servicio con la Fuerza Aérea Rusa.
Un bombardero Tu-22M3 ‘Backfire’ despegando:
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