Marie Lollis es una mujer estadounidense de 47 años de edad que se ha hecho una sesión de fotos para celebrar que por fin está divorciada de su esposo tras 13 años. La mujer quería demostrar que »las mujeres fuertes pueden seguir adelante y ser felices».
En la sesión de fotos iba vestida de negro y con unas botas altas de tacón. Quemó las fotos de su boda y bebió una copa de vino en la que se puede leer »finalmente divorciada, adiós».
Marie incluso posa con sus papeles de divorcio, mostrándolos orgullosamente mientras sostiene un cartel que dice: »Te deseo lo mejor, pero ya lo tenías».
La sesión de fotos se la hizo su cuñada y explica que su foto favorita es la que aparece riéndose con la cabeza ligeramente hacia atrás.
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