Un policía brasileño entró en un restaurante de comida rápida para agredir a la dueña porque se habían equivocado con su pedido a domicilio.
A Augusto Santana, de 34 años de edad, no le sentó nada bien que su pedido de tres hamburguesas viniese aderezadas con salsa BBQ, cuando él había pedido que una llevara únicamente mayonesa.
La cámara de seguridad del Nubia Lanches, localizado en el barrio de Jacarepaguá, en la zona oeste de Río de Janeiro, registró el momento en el que el hombre entró en el local, sacó una pistola y apuntó a los repartidores.
Acto seguido se fue hacia la caja y tras intercambiar una palabras con Liz Pacheco, de 24 años de edad, empezó a golpearla, la agarró de los pelos, la arrastró por el local y le siguió golpeando con la pistola y dándole patadas en el costado.
Tras la agresión, Santana se enfrenta a una pena de cárcel de 8 años y 6 meses. El juez lo definió como una »persona peligrosa» que cometió un »crimen cobarde».
La chica está recuperándose de varias fracturas y está en tratamiento psicológico tras la agresión.
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