»Durante mis vacaciones en la isla de Skiathos, una familia de cisnes nadaba a través de la orilla de la playa. Algunas personas cogieron sus teléfonos para tomar fotos, la dama en particular se acercó y el cisne padre defendió a su familia atacando a la señora. El resultado final fue que la dama se cayó al agua gritando que alguien le salvase su teléfono».
»Señora!, que no queremos fotos!»