La piscina municipal de Catarroja, en Valencia, tuvo que cerrar después de encontrarse excrementos en ella. El Ayuntamiento aplicó el protocolo de sanidad y estuvo cerrada durante un día.
La piscina fue vaciada y se volvió a llenar de agua, ajustando de nuevo el cloro. El alcalde de Catarroja explicó que no se localizó al responsable de esta situación.
El mismo alcalde ha hecho una llamada al »civismo», ya que no es la primera vez que las piscinas de Valencia sufren este problema.