El sueño de multitudes voladoras fue seguramente el que animó a Michael Browning a pasarse toda su vida ideando los más fabulosos aparatos para alzar el vuelo. Aunque ha sido su hijo, Richard, quien, tomando el relevo, ha conseguido construir un traje volador que recuerda al que Anthony Stark viste para convertirse en Iron Man.
Richard Browning es el fundador de Gravity, una compañía con la que ha desarrollado, construido y patentado un sistema personal para volar. Durante los últimos dos años, la compañía ha llevado su traje a más de 60 eventos en 20 países diferentes, demostrando que es una tecnología viable.
Así que es posible que el futuro se haya hecho esperar un poco más de lo que se aventuraba en los ochenta pero, quizá, ya esté llegando…