Leonid Grayser, de 18 años de edad, iba a ser juzgado por acabar con la vida de su hermana durante un ritual. En el juicio lo metieron en una jaula para evitar problemas y casi consigue escaparse por el techo de la sala.
Grayser consiguió salir por la parte de arriba de la jaula y luego se metió por el falso techo de la sala y a punto estuvo de escaparse.
Los agentes que lo custodiaban consiguieron agarrarlo y el joven volvió a bajar por sí mismo al interior de la jaula.
Grayser iba a ser juzgado por terminar con la vida de su hermana de 21 años durante un ritual. Iba a quitarle los demonios y terminó acabando con su vida. En la vivienda también se encontraron drogas.
Este fue el momento:
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