Algunos jubilados chinos han puesto de moda en el país un remedio bastante cuestionable para superar los problemas de espalda y dolores de cuello: colgarse de la cabeza.
Utilizan una especie de arnés que cuelgan de un árbol para luego colocárselos debajo de la barbilla y en la nuca. Tras eso, levantan los pies del suelo y quedan colgando del cuello.
Realizan diferentes movimientos, dando vueltas, girando y forzando el cuello. La teoría de quienes lo practican es que eso estira las vértebras, reduciendo la presión sobre los nervios y aliviando los dolores.
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