La Policía Local de Lepe, en Huelva, interceptó un jeep que intentaba entrar a la playa de La Antilla a través de un paso para peatones con unos 200 botellines de cerveza en hielo en la parte trasera.
El conductor fue informado de que le iban a imponer una sanción de hasta 3.000 euros por acceder a la playa con vehículos no autorizados.
»Aunque pueda parecer muy guay, acceder a la zona de baño con un todoterreno cargado de botellines en plan colegueo» puede derivar en sanciones que rondan los 3.000 euros, «más aún si lo hace por una pasarela habilitada para el público y a la que se le han causado algunos desperfectos», indicó la Policía en sus redes:
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