Las siete personas justas (cinco hombres y dos mujeres) del tribunal de Fairfax (Virginia) alcanzaron un veredicto en la causa civil por difamación entre Johnny Depp y Amber Heard, que en su día fueron matrimonio y que han protagonizado la guerra de Hollywood. Los dos se cruzaron acusaciones de agresiones y el jurado dio una victoria amplia a Depp, por considerar que su exesposa hizo tres pronunciamientos en un artículo del The Washington Post sobre abusos sexuales y violencia doméstica que no ha probado como ciertos y que los realizó con malicia para difamar a su marido.
En su veredicto, el jurado otorgó una indemnización de 10 millones de dólares como compensación por ese primer pronunciamiento difamatorio y 5 por daños punitivos con el segundo. Con todo, la juez rebajó estos segundos 5 millones a 350.000 dólares dado que es el límite del estado de Virginia –donde se ha celebrado el juicio– en condenas por daños punitivos. Depp había reclamado 50.
Por contra, Heard no se marchó de vacío pese a la aparente derrota, puesto que le concedieron 2 millones en su contra demanda –en la que reclamaba 100 millones de dólares–, porque el agente de Depp aseguró en el Daily Mail que sus acusaciones eran un montaje. El jurado no lo ha visto de la misma manera, por contradictorio que parezca.
“El veredicto significa para las mujeres volver a un tiempo donde denunciar un abuso significaba ser humillada y avergonzada”, lamentó Heard en un comunicado. «La decepción que siento hoy va más allá de las palabras», añadió. En su respuesta, Depp se quejó de que durante seis años su vida y la de los que le rodean han sufrido el desprestigio.
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