Ocurrió en el Delta del Okavango, Botswana, África. El fotógrafo estadounidense Graham Springer estaba trabajando sacando una serie de fotos de un grupo de leones cuando de repente una leona apareció de improviso junto a él.
Graham permaneció completamente inmóvil mientras el animal merodeaba a su lado. En el minuto 1:02 se puede apreciar como la leona parece que se va a ir, pero se da la vuelta y vuelve junto a Graham a olisquearle. El fotógrafo supo mantener la calma y ni se movió. Finalmente el animal se marchó sin hacerle ningún daño.
La cara de Graham a partir del minuto 1:40 lo dice todo…
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