El Koenigsegg One:1 se ha convertido en el coche que más rápido acelera y frena en la prueba 0-300-0 km/h. Alcanza los 300 km/h en 11,922 segundos y a esta velocidad es capaz de detenerse en 6,03. Todo el proceso lo completa en 17,95 segundos.
El piloto que ha conseguido este récord es Robert Serwanski, en la pista de pruebas de Koenigsegg en Angelholm, Suecia.
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