Los habitantes de Bangkok fueron testigos el lunes de como un meteorito atravesó la atmósfera a plena luz del día. Se desintegró a unos 100 kilómetros de altura y, pese a su intenso brillo, pesaba menos de un kilo.
La página Satview, dedicada al seguimiento de satélites y objetos en órbita, informó que la bola de fuego es el fragmento de basura espacial 40459U, cuya entrada en la atmósfera estaba prevista precisamente para el día siete en esas coordenadas.
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