Brad Holmes es un chico de 24 años de edad de Southampton, Reino Unido que decidió gastarle una broma muy cruel a su novia Jenny Davies, de 22, aprovechando el día de San Valentín.
Brad preparó la cámara y llamó a su novia. Se puso de rodillas frente a ella y la joven se echó las manos a la cabeza pensando que le iba a pedir matrimonio…
¿Pero qué es lo que pasó a continuación?
El chaval le dijo a la novia: »Sabes que me haces el hombre más feliz del mundo. Estoy temblando, pero te amo». Después sacó una cajita del bolsillo y lo que parecía ser un anillo, en realidad era una bolsa de té. A continuación le preguntó: »Jenny, ¿me haces una taza de té?».
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