La oficina del Sheriff del Condado de Greenville, en Carolina del Sur, Estados Unidos recibió una llamada de una niña de tan solo dos años de edad pidiendo ayuda para vestirse.
Martha Lohnes, una oficial que se encontraba en la zona en ese momento, fue a casa de la pequeña y se la encontró en la puerta principal con los pantalones bajados y era incapaz de subírselos. Martha ayudó a la pequeña a subírselos y después de eso, la niña le pidió un abrazo a la agente. La oficial explicó a ABC News que ese momento fue el mejor de su turno.
Al parecer, los padres estaban en casa pero no se dieron cuenta de que la pequeña había hecho la llamada a la policía.
(Vía)
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