Padre e hija tenían preparada una buena sorpresa para todos los invitados de la boda. Cuando llegó el momento del vals, la música empezó con normalidad, pero de repente se cortó y empezó a sonar »U Can’t Touch This», de MC Hammer…
Según contó la hija más tarde… »Lo mejor de todo fue ver lo feliz que estaba mi padre. Ése fue un sueño hecho realidad. Soy su hija mayor, y la única mujer, así que era su última oportunidad para hacer algo así. Pasó años hablando de hacerlo y finalmente me convenció».
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