El pasado 9 de marzo un equipo de arqueólogos alemanes y egipcios hizo un descubrimiento colosal. En un suburbio de El Cairo llamado Matariya se encontraron enterradas partes de una enorme estatua de 3000 años de antigüedad. Al parecer, esta estatua representa al faraón Ramsés II.
Se recuperó el busto y la cabeza de esta antigua estatua, que miden unos 8 metros y están hechos de cuarcita. También se han encontrado trozos de un obelisco y la parte superior de una estatua mucho más pequeña que representa al faraón Seti II, nieto de Ramsés II.
Estos restos serán expuestos en el Gran Museo Egipcio que abrirá sus puertas en el año 2018.
2 Comments
Leave a Reply