Una boda civil en el Ayuntamiento de Cádiz termina con un menor detenido, una joven identificada que se había fugado de un centro de tutela y una trifulca con algunos de los allí presentes.
El novio era un preso que fue trasladado desde la cárcel para contraer matrimonio. Los agentes custodiaban al joven para evitar su fuga u otros incidentes. Cuando la boda termina y los agentes van a meter al novio en el coche patrulla para llevarlo de vuelta a la prisión, una mujer menor de edad empezó a insultar a los policías, por lo que se procedió a su identificación. Esta se negó a darles la documentación.
Unos educadores sociales explicaron a la policía que esta joven se había fugado del centro donde está interna. Después de comprobarlo, la chica fue trasladada a la Comisaría Provincial donde fue realizada el acta de entrega a sus cuidadores.
Cuando se la llevaban, el novio de la menor empezó a pegar a los agentes dándoles patadas y puñetazos. El joven, de 17 años, fue detenido como presunto autor de los delitos de resistencia y atentado contra agente de la autoridad.
(Vía)
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