Se llama Simba y es un león de casi dos años de edad y 250 kg. de peso que vive como cualquier otro animal doméstico en la misma casa que sus dueños, una familia de Olot, en Girona.
La pareja rescató al animal cuando sólo tenía tres meses de vida. El destino de Simba era un circo y desde ese día han convertido su finca en una auténtica reserva natural.
Se gastan al mes una media de 500 euros el alimentarlo. Come carne de ternera, de pollo y de conejo. Manjares que es capaz de compartir con el perro de la casa.
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