Esta es la historia de Alan Kempster, un hombre que en el año 1999 sufrió un accidente de moto por culpa del conductor de un casmión ebrio que le pasó por encima. Ese conductor huyó y a Alan le tuvieron que amputar dos de sus extremidades, brazo y pierna de su lado derecho.
Ha sido duro, pero poco a poco Alan se ha ido recuperando, hasta el punto que ha cumplido su sueño, volver a competir. Modificó su motocicleta trasladando todos los mandos al lazo izquierdo. En estos casos, vale más una imagen que mil palabras, mejor que lo veas tu mismo… ¡Grande Alan!. Todos nuestros respetos.
CASMIONES ASESINOS!
Es sorprendente como puede mantener el equilibrio aún sin sus extremidades derechas.
la moto ayuda mucho, las motos de competencia mantienen mucho equilibio, aunque eso no le quita el merito,.