David Dowell, un joven australiano de 34 años de edad, falleció en diciembre de 2018 después de 10 días de agonía causada presuntamente por comerse un pequeño lagarto. Su familia continúa reclamando justicia y exigiendo respuestas después de siete meses.
Los amigos de David vieron como se comía un gecko, un lagarto pequeño, después de ser retado a comerse un reptil.
Su hermana explicó que al ver el estado en el que se encontraba David, llamaron rápidamente a una ambulancia para que lo llevara al hospital, poro los sanitarios se negaron a hacerlo al considerar que se trataba de un problema gástrico o de una resaca.
Cuando el joven por fin fue llevado llevado al centro hospitalario, los médicos le diagnosticaron salmonelosis, una bacteria que causa diarrea, dolores estomacales y fiebre.
Pero su estado empeoró mucho: Empezó a vomitar bilis verde, el vientre se le inflamó y la orina era de color negro. Sus pulmones se llenaron de líquido del estómago y sus testículos se habían hinchado alcanzando el tamaño de pomelos y supuraban.
Varios días después de los síntomas, David falleció durante una operación. La causa de la muerte no está clara, ya que los médicos descartaron que la muerte pudiera ser por comerse el lagarto.
La familia considera que se pudrió de dentro hacia fuera y continúan su cruzada para que haya justicia o al menos respuestas.
(Vía)
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