Un juez de Gresik, en la isla de Java, ha castigado a un total de 8 vecinos que no utilizaban mascarilla a cavar tumbas para personas fallecidas por Covid-19 en el cementerio de la aldea de Ngabetan.
«Sólo hay tres enterradores disponibles en este momento, así que se me ocurrió poner a estas personas a trabajar con ellos», explica el juez.
A cada dos personas se les asignó un sepulcro. Uno cava mientras el otro va colocando tablas de madera en el hoyo para colocar encima el cadáver.
«Con suerte, creará un efecto disuasorio contra las infracciones», explica el juez.