El juez ha condenado al joven que simuló haber sido víctima de una brutal paliza a manos de unos jóvenes encapuchados a una multa de cuatro euros diarios por un tiempo de cuatro meses.
El joven ha acudido este viernes al juzgado de Instrucción nº 52 de Madrid para declarar en calidad de investigado. Al término de la declaración y tras reconocer todos los hechos que se inventó, se ha transformado la diligencia en un juicio rápido.
Durante el juicio rápido se ha conformado con la pena impuesta, que ya es firme.
Como publicamos en su día en este post, fue una denuncia falsa. El chico, que tiene pareja, tuvo miedo a que se enterara de una práctica sadomasoquista, al verse las marcas que le habían dejado. Le llamó, le hizo unas curas y luego ambos fueron al centro de salud. La enfermera dijo que si las marcas eran fruto de una agresión, por protocolo, debía dar parte a la Policía.
El joven también dijo que era falso que hubiera una manada de ocho personas atacando en el barrio. Todo lo confesó después de ser llamado a comisaría y un largo interrogatorio, en el que se vino abajo.
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