En la cárcel de A Lama, en Pontevedra, requisaron un televisor porque un preso estaba recibiendo mensajes del exterior vía Teletexto.
Una resolución de la Audiencia Nacional detalla lo sucedido en esta prisión gallega entre los días 17 y 20 de enero de este mismo año, según podemos leer en La Voz de Galicia.
«Por motivos de seguridad» le confiscaron a un preso el televisor y cuando se lo devolvieron el menú y el Teletexto estaban bloqueados. En la resolución, apuntan que «se ha detectado que los mensajes de Teletexto eran utilizados para comunicarse los internos con personas del exterior través de páginas abiertas de citas, contactos o anuncios».
Los internos y las personas que se comunicaban con ellos utilizaban seudónimos, así como palabras clave, en páginas y horas previamente concertadas entre los interlocutores.
Se tomó la decisión de que los televisores que se pudieran adquirir en el economato de la prisión ya tuviesen restringida las funciones de interactividad y conectividad. Pero el problema surgió con los aparatos adquiridos en el exterior, por lo que se optó por bloquear estos servicios.
