Un joven argentino de 25 años de edad se enfrenta a un delito de robo por entrar en la casa de su vecino y llevarse a su perro que estaba atado y completamente desnutrido.
El chaval decidió compartir las imágenes del estado del perro, de raza pit bull, para que todo el mundo supiera lo que estaba pasando.
»Prefiero ir preso antes de que se muera», explicó el joven.
La Policía, junto con un veterinario, fue a su casa pocos días después del robo para valorar en qué condiciones se encontraba. Fue entonces cuando le informaron acerca de que había cometido un delito, pero la noticia no le entristeció. »Voy a ir contento (a la cárcel) porque el perro va a estar más que bien», aseguró.