El colegio Trillades de la ciudad francesa de Avignon se cierra a las 8:30 horas, pero los padres de algunos alumnos no están dispuestos a que se pierdan las clases y cuando llegan tarde, lanzan a los niños a través de la verja de casi dos metros de altura.
Pero esto no es que lo hagan un par de padres… Parece ser que se ha convertido en una práctica muy habitual y el centro se h visto obligado a colocar carteles advirtiendo a los padres del peligro que supone esto.
«No lances a los niños por la verja», reza uno de los carteles. «Cuando llegues tarde, vuelve a las 10:00 o a las 15:00 horas», recuerdan desde el colegio.
La directora del colegio, Sanna Mezian, explicó en una entrevista que el equipo educativo tiene más que suficiente con esos padres «irresponsables»: «Los padres que llegan después de que suene el timbre tiran a sus hijos, literalmente. No es algo puntual o aislado».
La medida de cerrar las puertas de los colegios es como medida de seguridad sobre todo tras los últimos ataques terroristas que ha sufrido el país.
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