El juez de menores Emilio Calatayud, conocido por sus sentencias ejemplares, considera que el teléfono móvil es, para los niños, un objeto tóxico y adictivo. «Es un instrumento muy peligroso que puede servir para cometer algunos delitos», dice el juez.
Según el juez, los padres no deberían comprar móviles a sus hijos hasta que estos no tengan por lo menos 14 años de edad. En cambio, algunos padres se justifican asegurando que con un móvil su hijo está mucho más controlado.
Ansiedad o estrés: El uso abusivo del teléfono móvil puede generar trastornos como ansiedad o estrés. Los especialistas piden que se use el sentido común, que se establezcan pactos con los menores y que se fijen normas.
(Vía)
30 Comments
Leave a Reply