Una joven fue condenada por un tribunal talibán a recibir 40 latigazos tras ser acusada de relaciones inmorales por hablar por teléfono con un joven.
Las imágenes muestran a la joven colocada de rodillas en el centro de un círculo delante de un multitud para ser flagelada por dos hombres que se turnan mientras ella grita «Me arrepiento, es mi culpa, me he equivocado».
Las imágenes aparecieron en Facebook y se sitúan a las afueras de Herat. El joven con el que habló también fue detenido y se encuentra en una prisión talibán.