Leonor es una mujer argentina que tuvo que abandonar las clases cuando era joven debido a problemas familiares, incluida la muerte de su madre, aunque su deseo de reanudar sus estudios nunca la abandonó.
Cuando cumplió 98 años, comenzó a asistir a la Escuela Primaria para Adultos de Laprida y desde entonces no ha faltado un solo día.