Kim West es una mujer que tuvo a su hijo Ben Ford cuando tenía 19 años de edad. Ben se crió en Michigan y tuvo una infancia muy feliz pero a medida que fue creciendo empezó a interesarse por su padres biológicos.
Después de 30 años, Ben consiguió ponerse en contacto con Kim y se produjo el primer encuentro. Probablemente ambos esperaban que ese primer encuentro fuese bonito y emocionante, pero según explican en el diario ‘The New Day’, en ese momento ambos sintieron una fuerte atracción sexual.
Después de varias citas y encuentros amoroso, Ben dejó a su mujer y se sinceró con ella: »Cada vez que tengo sexo contigo desde que conozco a mi madre, me imagino que es ella la que me está besando, sino no puedo hacerlo».
Ambos planean casarse y tener hijos. En el estado de Michigan las relaciones incestas son ilegales, pero la pareja tiene pensado mudarse a otro estado para cumplir su deseo de formar una familia.
(Vía)
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