Ocurrió el sábado por la tarde delante del Naschmarkt, el mercado más conocido de Viena. Un hombre se encementó la cabeza para hacer una acción artística bastante extra y muy peligrosa.
Vertió cemento sobre su cabeza para después sentarse ante decenas de viandantes e intentar liberarse con un martillo.
La gente estaba preocupada por la salud del hombre y avisaron a los servicios de emergencia.
Cuando el cuerpo de bomberos llegó a Naschmarkt, el activista que, según su propio relato, estaba realizando una campaña de arte, ya estaba ocupado liberándose con un martillo. «Dijo que estaba bien y que no necesitaba ayuda», explicó el portavoz del cuerpo de bomberos.
Aproximadamente entre diez y 15 minutos después, el activista logró quitarse el cemento de la cabeza. Sin embargo, hasta ahora no ha sido posible averiguar para qué debería ser esta acción.
Ha hecho realidad el meme:
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